Fiscal (Consultoría y Planeación)
Los negocios requieren de un modelo, plan o esquema que atiendan las disposiciones fiscales nacionales e internacionales que se actualizan cada año para fortalecerse, ser más competitivos y eficientes en sus servicios, para maximizar sus utilidades mediante una adecuada planificación fiscal; por ello, algunos de los servicios que ofrecemos son:
Asesoría fiscal derivada de reestructuraciones corporativas, arranque, mejora y adecuado mantenimiento de los modelos de negocios, adquisiciones de empresas, escisiones, fusiones, proyectos de infraestructura, inversiones, entre otros; asesoría fiscal de acuerdo a las diferentes actividades empresariales que realizan nuestros clientes que incluye el diseño e implementación de estructuras fiscales de todo tipo, de operaciones nacionales e internacionales derivada de sus negocios.
Planeación para maximizar beneficios fiscales y deducibilidad; asesoría a multinacionales con presencia en el país y en otros países que busquen evitar la doble tributación en México.
Elaboración de diagnóstico fiscales a empresas y personas que permitan incrementar utilidades; evaluación legal de riesgos e impacto fiscal en decisiones de sus actividades. Diseño, estrategia, preparación y materialización en las actividades de la empresa encaminadas a solicitud de devolución de impuestos.
Asesoría en análisis, estudio y actualización constante de los cambios legislativos y reglamentarios que impacten a la empresa; tratamiento de contribuciones locales; cumplimiento puntual de obligaciones tributarias y aspectos preventivos Due-Diligence.
Finalmente, el pago de impuestos no es la única de las responsabilidades de los contribuyentes en México, la normativa fiscal aplicable establece obligaciones relativas a que las operaciones y CFDI cuenten con materialidad, razón de negocios y fecha cierta que los sustenten. Existe un gran número de procesos iniciados por las autoridades fiscales que derivan en un proceso de carácter penal o en su caso imposición de un crédito fiscal.
Para evitar lo anterior, es conveniente que las empresas y personas físicas con actividad empresarial establezcan una estrategia fiscal con perspectiva de prevención que minimice los riesgos asociados a delitos fiscales.